Dicen que a la tercera va la vencida, pero parece que no. Nos dirigimos a Jaén con la intención de realizar la ruta de las dos vías verde, la del Aceite y la Subbética de Córdoba pero la lluvia, el viento y el frío fueron los protagonistas de esta salida. Y ¿Cómo no? el barro..., que no puedo faltar. Lo que en un principio se mostraba como un placentero viaje se convirtió en un verdadero sufrimiento.
Al empezar en Jaén soplaba un fuerte viento que casi nos tiraba de la bici y pronto apareció la lluvia, constante y sin parar durante más de 40 kilómetros. Lo que se mostraba como una jornada de convivencia entre ciclistas fue convirtiéndose en lo de siempre grupos pequeños y diseminados por la ruta. En realidad tampoco se pudo disfrutar del paisaje, era resistir como fuera las penalidades e inclemencias meteorológicas.
Más de seis horas de autobús para luego sufrir. Os dejo algunas fotos de la ruta en ella también se puede contemplar como quedaron las bicicletas. Ojalá exista (difícil) otra oportunidad y disfrutar realmente de esta ruta.
